Col·legi Oficial de

Veterinaris de les

Illes Balears

El Colegio Oficial de Veterinarios de las Islas Baleares (COVIB) ha solicitado al Ministerio una moratoria de un año para facilitar una adaptación progresiva del colectivo veterinario a PRESVET, el sistema informático central de control de prescripciones veterinarias de antibióticos, con el objetivo de garantizar el correcto funcionamiento de la plataforma y, de esta forma, poder cumplir con la normativa sin poner en riesgo la asistencial laboral.

El COVIB considera que la entrada en vigor del Real Decreto 666/2023, de 18 de julio, que regula la distribución, prescripción, dispensación y uso de medicamentos veterinarios, el pasado 2 de enero, y que transpone el Reglamento Europeo, puede ser una gran oportunidad para avanzar en la lucha contra las resistencias a los antibióticos. Sin embargo, el Colegio reconoce que los veterinarios han encontrado numerosos obstáculos para comunicar los antibióticos de sus tratamientos, ya que PRESVET presenta varias dificultades, como el incremento de la carga burocrática en las clínicas, especialmente en las más pequeñas, diferentes problemas técnicos en la plataforma y un régimen sancionador desproporcionado.

“El COVIB considera esencial garantizar un período de adaptación razonable, una transición que debe realizarse con todas las garantías para evitar que los problemas técnicos y la carga burocrática supongan un obstáculo en el trabajo diario de los profesionales. Es necesario aplicar flexibilidad para los centros más pequeños, con asesoramiento, comprensión y sentido común, sin aplicar el régimen sancionador definido, que contempla multas desproporcionadas”, manifiesta el presidente del COVIB, Ramón García.

En opinión del COVIB, PRESVET sí ha puesto en evidencia un problema con el que se encuentra el colectivo en su día a día: la disponibilidad insuficiente de medicamentos veterinarios en las farmacias para garantizar el tratamiento final de los pacientes (actualmente, solo el 2% de los medicamentos veterinarios están disponibles en las farmacias). Por ello, hasta que se implementen soluciones adecuadas, el veterinario clínico deberá recurrir a la cesión de medicamentos (suministro de los comprimidos necesarios desde su botiquín para asegurar el tratamiento final de los pacientes), opción contemplada por la legislación siempre que se realice de manera razonable y justificada cuando la situación lo requiera.

Esta problemática ha sido trasladada en las últimas semanas a la Dirección General de Prestaciones, Farmacia y Consumo y al Colegio Oficial de Farmacéuticos de las Islas Baleares, con los que se han abierto vías de comunicación y colaboración (creando un grupo de trabajo sobre el medicamento) para buscar soluciones conjuntas.

Asimismo, se ha instalado al Consejo General de Colegios Veterinarios de España para abordar esta problemática de manera homogénea en todo el Estado, motivo por el cual ha convocado una asamblea general extraordinaria el próximo viernes 14 de febrero.

Paro veterinario del martes 11 de febrero

El COVIB defiende cualquier iniciativa que reivindique mejoras en el sector veterinario, siempre que se haga desde el rigor, la credibilidad y el prestigio de la profesión. En este sentido, respeta todas aquellas acciones encaminadas a optimizar la implantación de PRESVET y garantizar unas condiciones de trabajo adecuadas. No obstante, considera necesario desmentir información alarmistas e inexactas que han circulado en algunos ámbitos y que sostienen que la nueva normativa pone en riesgo el acceso de los animales a los tratamientos antibióticos necesarios. Esta afirmación no es correcta, ya que PRESVET no limita la capacidad de prescripción de los veterinarios, sino que establece un sistema de registro y control de las prescripciones de antibióticos para garantizar su uso responsable.

Por este motivo, el COVIB no comparte este argumento como justificación para el paro simbólico previsto para mañana martes 11 de febrero, convocado por diversas organizaciones. Sin embargo, respeta y comprende la decisión de los colegiados y colegiadas que deciden adherirse a la iniciativa, ya que el malestar generado por la aplicación de PRESVET ha sido el detonante de la convocatoria, en la que también se han incluido otras demandas históricas con las que el COVIB sí está de acuerdo y ha reivindicado desde hace años, como son la reducción del IVA veterinario en clínicas, que sigue en el 21%, a diferencia de otras profesiones sanitarias (los médicos). están exentos y los farmacéuticos tienen un IVA reducido del 4%); la venta de medicamentos veterinarios no sujetos a prescripción, actualmente prohibida a los veterinarios, pero permitida en tiendas de animales y grandes superficies; y la cesión completa del medicamento en casos necesarios, entre otras reclamaciones.

El COVIB reitera su compromiso de seguir trabajando para que la adaptación a PRESVET se realice de manera ordenada, justa y con garantías para los profesionales, y continuar defendiendo los intereses del colectivo veterinario ante las administraciones competentes. “El Real Decreto adelanta cinco años una obligación marcada por Europa, pero, como sanitarios que somos, no podemos rechazarla, sino adecuarla a la realidad de nuestro día a día”, concluye Ramón García, presidente del COVIB.